De niña la mejor hora del día era la de la merienda, mi madre siempre nos compraba unas galletas deliciosas que hacia una de nuestras vecinas, la Sra. María, al tiempo y ella enfermar me facilitó la receta. Hoy la comparto con ustedes para que su familia también ame el sabor de esta preparación.
250 gramos de mantequilla
150 gramos de azúcar
400 gramos de harina de trigo todo uso
1 huevo
Pizca Una de sal
Dificultad: Fácil I Tiempo: 1 hora I Porción: 4 Personas
Precalienta el horno a 180 grados. En un molde bate la mantequilla con el azúcar, luego incorpora la sal y el huevo hasta que se haga una pasta algo cremosa, agrega la harina de trigo poco a poco y ve mezclando hasta que no haya grumos. La masa debería quedar como una especie de “masa grande de galleta” un poco sólida. Métela en la nevera por 30 minutos, transcurrido el tiempo saca tu masa para galleta y extiéndela en una superficie plana.
Ahora simplemente con ayuda de un cuchillo o de un molde redondo ve cortando las galletas y poniéndolas en una bandeja para hornear previamente engrasada.
Si lo prefieres puedes simplemente amasar bolitas de harina, ponerlas en la bandeja y aplastarlas con el tenedor hasta darle la forma deseada.
Mete en el horno y cocina por 9-10 minutos o hasta que los bordes de las galletas de mantequilla estén ligeramente dorados.
Retira la bandeja del horno, saca las galletas y, si tienes más masa, repite nuevamente el proceso hasta que las tengas todas listas.
Déjalas enfriar sobre un plato o una cesta con tela y ¡buen provecho!